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Poesía, música, humor. Amancio Prada en directo. |
El próximo 12 de octubre del 2012, Amancio Prada actúa en el Gran Teatro de Cáceres. Esta entrevista no va sobre su música, de sobra conocida para aquellos que la amamos desde hace décadas. Tiene como objetivo acercarse un poco al hombre, al poeta, al ciudadano. Amancio Prada, músico, es exquisito, lírico, profundo, ajeno a modas. Amancio Prada, hombre, es, sin embargo, cercano, sensible, conocedor de su tiempo. Y se duele de este tiempo de caimanes y lobos.
UNO SÓLO TIENE LO QUE DA.
.- Usted me hizo sentir en una ocasión que también yo, que cualquiera de nosotros, podía llevar en el pecho un pájaro que lleva dentro un niño que canta lo que uno canta. En eso consiste su magia, su arte: embelesa al corazón a golpe de voz y de lirismo y hace sentir al que le escucha más cercano al poeta que quiso ser un día, más humano, mejor persona. Pero, cuando acaba la magia, cuando usted desciende del escenario y mira este mundo que ha hecho de Rosalía, de San Juan de la Cruz, de Goytisolo, de Cunqueiro instrumentos apagados en una banda donde los banqueros son los directores de orquesta, ¿cómo se le queda el cuerpo, cómo sobrevive a esto el poeta?
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Amancio Prada y Florián Recio en el Gran Teatro de Cáceres |
Pues me voy a tomar un vino con los amigos y sigo cantando. Los poetas no son instrumentos apagados, todo lo contrario. Los poetas alzan su lámpara en medio de la noche para alumbrar las conciencias, y cuanto más negro el panorama más nos hacen falta. Despiertan el canto del pájaro que llevamos dentro del pecho… Su voz pone el dedo en la llaga y al mismo tiempo es una caricia. A los banqueros especuladores que les den por saco. El dinero es cobarde. Son unos desgraciaos. Tendrán el dinero, un dinero que no es suyo, pero no tienen el canto. ¡Y esos directivos de Cajas de Ahorro que se han ido con jubilaciones millonarias después de una gestión nefasta…? Qué vergüenza.
.- Y, a propósito de Cunqueiro, decía Umbral que sólo un país como el nuestro puede permitirse el lujo de mantener en el banquillo a un genio como Cunqueiro. Yo siempre he pensado que a Cunqueiro no se le lee tanto como se merece quizás porque lo suyo eran los «excesos imaginativos», según a él mismo gustaba decir, y por aquí se aprecia más el llamar al pan, pan y al vino, vino. ¿Nos falta gusto por lo imaginativo? ¿Somos un país sin imaginación?
Estoy de acuerdo con Umbral. Cunqueiro es genial. No me canso de leerlo. Conozco el placer literario sobre todos gracias a él. ¿Exceso imaginativo? Decía don Antonio Machado que se miente más de la cuenta por falta de fantasía, también la verdad se inventa. Y Cunqueiro es un inventor, inventa la verdad cuando escribe de los curanderos y feriantes de su tierra galaica, cuando hace crítica literaria, cuando escribe teatro: “A noite vai como un río”, qué maravilla. Y sobre todo, poeta. Toda su obra está transida de poesía. Mala señal, sí, que sea tan poco conocido y reconocido. Es que somos un país bastante bruto todavía. Educación y cultura, eso es lo que nos hace falta. Lleva su tiempo.
.- Recortes, malestar, manifestaciones, desengaño general. As correntes apestadas de que hablaba Rosalía. Parece buen abono para el renacer de la canción protesta.
Sí. Nos estábamos aburguesando. Tan posmodernos todos…. Pues no. Hay que bajarse de la parra y ponerse a cavar la viña. Pero todos. Animaría mucho que los políticos fueran los primeros en dar ejemplo. Son servidores públicos, elegidos, no privilegiados. Nadie es más que nadie. Y que quien más tiene más aporte. Muchos van de patriotas, pero se llevan el dinero a paraísos fiscales. Somos un país con un potencial humano y natural enorme. Un país rico en tierra, mar y aire. Aquí se da el trigo, el olivo y la vid la mar de bien. Lo sabían bien los romanos. Por no hablar de tanto mar donde nadar y pescar. Ahora dependemos de nosotros. Si primamos el esfuerzo, la honradez y la inteligencia saldremos adelante.
.- Esta crisis, ¿es una de esas correntes apestadas, de las que decía Rosalía, …que pasen, que outras vendrán? ¿Es inevitable este ir y venir de la inmoralidad, esta tendencia suicida de la humanidad?
Eso parece, desgraciadamente. Que no aprendemos. Y luego, cada tanto, una guerra, Dios nos libre. O nos liamos a garrotazos, como nos pintaba Goya. Nos falla la memoria. Parece que cada generación nueva entierra la memoria de la anterior. Ya nos olvidamos de la vida tan esforzada que tuvieron nuestros padres y abuelos. Los graneros de su pobreza eran inmensos, y aún así ahorraban para dar la entrada del piso a sus hijos cuando se iban del campo a la ciudad. A veces echo de menos el pan de aquella pobreza.
.- Entiendo que hay dos fuerzas guerreando en nosotros; por un lado la razón nos empuja a la misantropía; por otro, la poesía nos reconcilia con lo humano. Duro equilibrio. Como en sus Libertarios. Poemas como disparos de francotiradores. Misántropos enamorados del alma humana. Y uno canta lo que le enamora. Es una frase que usted ha repetido en alguna ocasión. ¿Qué enamora a Amancio Prada en un texto? ¿Qué ha de tener un poema para que usted lo convierta en canción?
¿Qué ha de tener una persona para que te enamore? Es un misterio. No se sabe. Pero sí, un poema me tiene que enamorar para cantarlo. Cómo nace una canción… es un pequeño milagro, un regalo. Qué alegría. Cuestión de perseverancia y de suerte. Se trata de inventar la música del poema. Inventar en el sentido de hallar, de encontrar, de extraer, no de añadir. Para lo cual hay que pasarse la vida resoplando entre la fronda como el burro aquel de la fábula hasta que suene la flauta… por casualidad. Algo así.
.- ¿Qué futuro cree usted que le espera a la música, al negocio de la música, para ser más exactos?
La música es cultura. Y la cultura es alimento del alma. Cuidar eso es una responsabilidad social y política. Supongo que llevará su tiempo conjugar el apoyo alentador de lo público y del público. Ni todo gratis ni el desamparo total. Hay que apoyar sobre todo a los que empiezan, educar con estímulo y con exigencia.
.- ¿Cuál es el papel del artista en estos tiempos de crisis?
Pues el mismo que el de cualquiera, creo yo. Hacer bien tu trabajo, lo mejor que puedas, con una sonrisa por dentro y por fuera. Vivir con actitud de servicio más que de negocio. Y no amuermarse. Aprender siempre. Reinventarse. Volver a empezar. Y como artista poner tu canto o lo que sea, siempre del lado de los débiles, dar la mano a los que sufren y luchan por un pedazo de pan. Uno sólo tiene aquello que da.
Publicada en el Periódico Extremadura, viernes 11 de octubre de 2012
¡Vaya!
Este Florián Recio no sólo piensa bien y escribe mejor, sino que, además, se da el lujo de leer a Cunqueiro y escuchar a Amancio Prada.
Felicidades una vez más.
Que grande, por sencillo,,,grande.!!!