Sobre la mesa de cualquier diputado español se desparraman unos objetos minúsculos, caros, pero imprescindibles: un móvil, un ordenador portátil, una blackberry, cosas así. Y cuando su señoría se cansa de mirar la pantalla, se levanta, mete un café en el microondas y ojea su novela preferida en un ebook. No lo digo con escándalo. A los niños de mi generación nos dijeron que en el 2000 los cielos iban a estar atestados de coches voladores. De modo que un político digitalizado es poca cosa para escandalizarse.
El escándalo, a mi entender, estriba en el denominador común de todos esos cacharros: ninguno ha sido inventado en un laboratorio español. Y no es que en estas tierras la materia gris sea menos gris que en otras tierras, es sólo que en nuestros laboratorios andan más atareados en resolver cómo llegar a fin de mes que en cómo llegar a la Luna. Nuestros presupuestos para I+D+i, que nunca han sido para tirar cohetes, se han visto reducidos en más de seiscientos millones de euros. Lo cual deja a los investigadores a las puertas de la emigración. A tal extremo ha llegado el asunto que van a llevar al Senado la propuesta de crear una casilla en apoyo a la ciencia en la declaración de la renta, tal y como se hace para la Iglesia. Pero la Iglesia tiene a Dios de su parte y la Ciencia a los políticos en su contra.
Que el ciudadano tuviera la opción de elegir el destino de su dinero sería lo lógico si no fuera porque aquí lo lógico nos pilla siempre con el pie cambiado. Ya verán como a nuestro diputado, cuando le vengan a hablar sobre ciencia y progreso a él le pilla debatiendo sobre eso tan moderno como la constitucionalidad del matrimonio homosexual. No es que el futuro no llame a nuestra puerta, es que dentro hay mucho ruido y poca I+D+i.
Contraportada del periódico Extremadura
España sí tiene I+D+i!!!!
La clase política dominante es un ejemplo de Indiferencia, Desfachatez e incompetencia.
Una casilla en la declaración de la renta????
Lo peor es que la ocurrencia ya ni me sorprende…
Un abrazo, Maestro